Si entras a este blog es bajo tu absoluta responsabilidad. Nadie asegura que salgas vivo... o entero. Si imaginaste que aquellas pesadillas interminables que sufrí­as de niño cuando te daba fiebre eran horrorosas, prepárate para conocer una nueva dimensión de la palabra HORROR...

miércoles, diciembre 03, 2008

Realidad

A veces la realidad se tornaba cada vez más irreal a sus obnubilados ojos. Mientras el mundo se caía a pedazos frente a la puerta de su casa, él se preocupaba exclusivamente de unos sueños que a nadie ayudarían, pues jamás se concretarían. Mientras su familia perdía el norte gracias al alcohol y a los embarazos no deseados, él soñaba con una familia que no era la suya y que ni siquiera sabía si podría existir, pues nunca había abandonado el límite de su pueblo y de su sueldo. Mientras su vida giraba en torno a lo que lograba producir en un campo de mala muerte, él jugaba con inventos de su mente que le permitían creer en el mañana.

El pobre campesino luchaba esa mañana, como casi todas las mañanas de su vida, contra el campo para poder arrancarle algo comercializable, o por lo menos comestible. La batalla contra la vida era ardua como siempre, y como nunca parecía estar ganando; pero como ganar una batalla no asegura triunfar en la guerra, debía seguir con su denodado esfuerzo. Luego de un par de meses de esfuerzo máximo logró sacar adelante el yermo pedazo de tierra y transformarlo en algo de lo cual se podía vivir. Por fin pudo cosechar los frutos de su siembra, y la venta fue más que provechosa.

Feliz estaba el campesino camino a su caserón, pues por fin podría ofrecerle algo de decencia a quienes de él dependían. Al llegar a la entrada se encontró con la más dolorosa imagen que la vida le podía haber ofrecido, como arremetida final en la guerra que ambos llevaban. Ahí, cubierto por una vieja lona estaba el cadáver de su hijo mayor, apuñalado por el amante de su esposa, quien huyó con ella y con sus hijos, quienes eran de aquel con quien su mujer lo traicionaba por años. La policía le dijo que nada podían hacer, pues el hombre era dueño de la mitad del pueblo y tenía a todos comprados, incluido el juez. Luego que lo ayudaron a enterrar el cadáver, los policías se fueron y lo dejaron masticando el sabor amargo de la derrota frente a la vida. Si no hubiera dedicado tanto tiempo a soñar, el destino sería distinto para todos.

A la mañana siguiente estaba todo listo, la cuerda firme atada al árbol y el banquillo cojo que lo ayudaría a cortar su sufrimiento, y a no rendirse ni entregarse a su enemiga. Cuando ya estaba en el banquillo un extraño vehículo, más fantástico que todo lo que él había imaginado en su vida, llegó a las puertas de su caserón. De él bajaron personas que jamás en su vida había visto, pero que reconoció al instante: eran todos aquellos que habían consumido tiempo en su mente, aquellos que soñaba como su familia. Con sumo cuidado y cariño lo ayudaron a bajar del banquillo y lo subieron al vehículo a comenzar la vida que siempre había soñado. Finalmente le había ganado la guerra a la vida. Al disiparse la nube de polvo levantada por el vehículo, quedó de recuerdo su cuerpo colgando de la firme cuerda al árbol.

16 Comments:

Blogger Francisco Méndez S. said...

muy buen final, me gustó bastante el cuento.

Saludos

4:12 p.m.  
Blogger Víctor Hugo said...

uuuuuuuuuuu ... qué triste historia...
por lo menos comenzó a vivir una mejor vida en otro mundo....

saludos!
VH

7:45 p.m.  
Blogger Víctor Hugo said...

uuuuuuuuuuu ... qué triste historia...
por lo menos comenzó a vivir una mejor vida en otro mundo....

saludos!
VH

7:45 p.m.  
Blogger Unknown said...

Un happy end a su manera, Doc!...Wena!

8:31 p.m.  
Blogger Marcel Pommiez said...

Crees en el amor???? Hice un post para ti...

Un abrazo

11:00 p.m.  
Blogger Claudia Corazón Feliz said...

Qué lindo final.

Saludos dostor.

10:37 a.m.  
Blogger Daniel. Te invito a visitar http://eldeportero.wordpress.com said...

Me dejó el sentimiento de que el protagonista sencillamente se rindió y no luchó.
Saludos

10:47 a.m.  
Blogger Sara said...

Que lindo, me encanto la historia, el final muy emotivo, buenisimo.

salu2.
SAra.

7:06 p.m.  
Blogger Unknown said...

La muerte siempre es la salvación??

12:11 p.m.  
Blogger Elena Lamas said...

Que buena historia, pero que terrible final, llegar a concretar sueños de esa forma....creo que si no existieran mis cables a tierra (tu sabes a quienes me refiero), quizás hubiese buscando alcanzarlo de esa manera.....soy una afortunada.

4:42 p.m.  
Blogger αnαcoretαhx ~ said...

Cruda Realidad!..

Ni en cuentos de princesas; eso fue un final feliz…

Saludos!!

6:33 p.m.  
Blogger MNB said...

Chutaaaaaaaaa.

Tuve que leerlo dos veces, porque no lo podía creer.

Me gustó mucho.

Cariños.

8:59 p.m.  
Blogger La_EsPeCtAdOrA said...

.......
un saluto doc

11:59 p.m.  
Blogger Unknown said...

Hola mi Doc... ayer le mostré a mi Heredera tu blog y le gustó mucho (me pidió el link para visitarlo después).

Este cuento me llegó muuuuucho, creo que es uno de los mejores que te he leído (talvez es porque ando mil veces más sensible). Me dió mucha pena, pero me encantó.

Gracias mi Blood. En serio gracias por tu ofrecimiento... mañana tengo hora con mi doc y voy a ver qué me dice... de ahí te cuento. Me siento un poco mejor, siempre dicen que el tiempo cura las heridas y lamentablemente por mucho que uno se resista, así no más es.

Te mando un abrazo apretado por aquello que te tiene más o menos no más, en serio espero que no sea algo grave.

Gracias de nuevo mi Blood. Besito.

3:10 p.m.  
Blogger Empty Shadows said...

Pero qué triste!, pero no por eso menos excelente... te quedó uy bueno este relato Blood.

Saludos, ando media desconectada del mundo Blogger por los exámenes, pero siempre que puedo te visito.

Besos,
Rockerilla.-

2:36 p.m.  
Blogger Mary Lovecraft said...

duro, poético y real.

todo a la vez

un beso mi hermanito ¡muuuuaaakkkss! :D

3:32 p.m.  

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