Crónicas de Blood I: Cementerio
Parece que este universo paralelo está algo muerto, gracias a un tal feisbuc. Eso me lleva a tomar una medida algo drástica: despertar al viejo y querido Doctor Blood. ¿Se acuerdan de aquellas historias de la vida del personaje? Para quienes no las recuerden (o conozcan) los invito a leerlas en el Kiosko Sangriento, capítulos 1 al 6. Hoy empezaré con algunas historias nuevas, situadas en cualquier instante de la vida de mi alter ego. No los aburro más, que empiece la función:
Crónicas de Blood I: Cementerio
Agazapado en el rincón más oscuro de la noche espero a los humanos. El frío y la lluvia que tanto los afectan me dejan indiferente: pese al clima reinante debo alimentarme, y estos malditos me la hacen difícil en invierno. Ayer cacé al último: estaba bien aunque algo grasoso. Al parecer deberé elegirlos más flacos de ahora en adelante.
Maldita lluvia, parece una verdadera cortina de agua limitando en parte mi visión, y casi totalmente la salida de mi cena. En estos casos podría acercarme más, y hasta meterme a alguna de sus construcciones en busca de ellos, pero por esta vez probaré algo distinto.
Raudamente pero sin dejarme ver llego al lugar donde entierran a sus muertos: no, no piensen mal, no me haré carroñero. Simplemente estos lugares oscuros y con cadáveres son bastante lúgubres, y tienen cuidadores que no abandonan nunca sus turnos. Cazaré a alguno de ellos, y si quedan sobras las enterraré aquí mismo para sus deudos.
Parece que ando de suerte, ahí viene uno. Con el mismo sigilo de siempre me escondo detrás de una lápida, y cuando pasa desprevenido por mi lado salto y… nada. El maldito es más rápido que yo, y parece no inmutarse. Sin que me note corro de nuevo hacia él y me lanzo con violencia sobre su espalda y… nada, otra vez en el suelo sin presa. Tercer intento, ahora de frente y con lentitud: cuando veo su presencia traspasando mi cuerpo y siguiendo como si nada, recuerdo la leyenda del cazador que murió de inanición tratando infructuosamente de devorar un espectro…
Crónicas de Blood I: Cementerio
Agazapado en el rincón más oscuro de la noche espero a los humanos. El frío y la lluvia que tanto los afectan me dejan indiferente: pese al clima reinante debo alimentarme, y estos malditos me la hacen difícil en invierno. Ayer cacé al último: estaba bien aunque algo grasoso. Al parecer deberé elegirlos más flacos de ahora en adelante.
Maldita lluvia, parece una verdadera cortina de agua limitando en parte mi visión, y casi totalmente la salida de mi cena. En estos casos podría acercarme más, y hasta meterme a alguna de sus construcciones en busca de ellos, pero por esta vez probaré algo distinto.
Raudamente pero sin dejarme ver llego al lugar donde entierran a sus muertos: no, no piensen mal, no me haré carroñero. Simplemente estos lugares oscuros y con cadáveres son bastante lúgubres, y tienen cuidadores que no abandonan nunca sus turnos. Cazaré a alguno de ellos, y si quedan sobras las enterraré aquí mismo para sus deudos.
Parece que ando de suerte, ahí viene uno. Con el mismo sigilo de siempre me escondo detrás de una lápida, y cuando pasa desprevenido por mi lado salto y… nada. El maldito es más rápido que yo, y parece no inmutarse. Sin que me note corro de nuevo hacia él y me lanzo con violencia sobre su espalda y… nada, otra vez en el suelo sin presa. Tercer intento, ahora de frente y con lentitud: cuando veo su presencia traspasando mi cuerpo y siguiendo como si nada, recuerdo la leyenda del cazador que murió de inanición tratando infructuosamente de devorar un espectro…
18 Comments:
Podría decirse que espero la hora del nuevo relato...
Coincidencias de la vida, ya me preguntaba ¿ qué pasará con Blood?... cuando hace 2 días leía "historias de sangre y otras vísceras"...y ahora aparece esto... queremos el n° II.
se te extraña en mi rincón
parece que el facebook te raptó
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todo es absolutamente nuevo
no conocía al personaje
me parece cool y dark al 100%
GENIAL RELATO
y no me mates cuando me vaya
ya que siempre te dejo comentario jajajaja
muakismuakis vitamínicos:-)
¡Qué susto los cementerios de noche y qué lindos de día!
Al principio pensé que quería cazar murciélagos.
Espero el Cap. II°, pero no te demores mucho.
Abrazos
OooohhhHHHh qué veo! mi querido hermanito retomando la vía de los cuentos laaaaaaaaarrrrrrrgooooooooosssss y por capítulos!! ¿he de ir juntando piedras por lo que pudier pasar??? o mejor me tiro directamente a tu yugular?????????? mwaaaa ha ha ha haaaaaha!!!!
Genial, ya sabes que me encantan tus historias, ya sean cortas o largas,
beso sangriento para tí, querido
Mary ;)
Hey!, muy bien!
Adivina cómo llegué aquí...
Sí, efectivamente, por "feisbuc" y la verdad, es que no me arrepiento en lo absoluto...
Ahora mismo me dirijo al Kiosko.
Saludos!,
Rockerilla.-
jajajajaja, que buena....
Ojalá mi comida sea también un espectro, sería genial.
Saludos nocturnos
Dostor, debo hacerle una confesión: aún no leo su libro. Tengo dos en mi velador esperando por mí, y otros más que espero que me traigan de Buenos Aires. Pero ahora me picó la curiosidad y voy a comenzar a leerlo luegito, de todas mangueras.
Saludos dostor sangrita.
Igual es dificil cazar espectros salvo que seas uno de los Cazafantasmas.
Saludos
es como amor y odio ..al face...
comenze amandolo y ahora lo odio...
pero como tantas cosas q estan a la vista q son solo espejismos...
saludos
Un poco despistado el vampiro eh ???
ahora tendrá que esperar a que su cena se decida a salir aún con la lluvia.
saludos.
Querido Doc: esperaba más de este relato del auténtico doc Blood... como es eso que haya confundido a un ser humano al que potencialmente podría comérselo con un espectro? es un tipo experimentado (desde el principio) así es que no me creo esa confusión... o es que estaba viendo visiones del hambre que tenía? lo siento Doc, pero esta vez quedé confundida...
Uff con tanto porrazo, tienes más posibilidades de morir de un traumatismo que de inanición bludi...¿porque yo no conocía estas historias???
Hola querido amigo Blood, esta vez pasé a invitarte para que visites mi blog y conozcas un cuento de terror, pero relatado por otro médico y reflejado en radiografías.
Un fuerte brazo,
Tu amigo,
Alejandro
Saludos desde Puerto Rico:
¡Tremendo blog! Nunca había leído historias relatadas con tal destreza. Lo felicito, tiene un nuevo lector.
Desde Puerto Rico
Michael Castro
Como siempre Doc un relato increible gracias por asustarme un poco el dia de hoy jeje.
Saludos Doc!!!
Dejemos a un lado eso de que "la tecnología nos une"... lo cierto es que la globalización nos arrastra y he nos aqui ;)
A mi me gustaron las aventuras de tu personaje... muy intenso y algo "oscuro" y con sabor a sangre jeje
pero siguiendo con tus letras y al descubrir carrroña, lo único que viene a mi mente es el final de jean Bauptiste Grenouille... tuviste alguna vez la oportunidad de leerle?
Un beso vampirezco ;)
hasta yo conservo aun mi pekeño e intimo espacio blogero que no sera jamas reemplazado por ese "caradelibro" que solo ventila nuestras vidas :P
mis respetos.. me gradan bastante sentarme a leer varias lineas antes de dormir..
mis respetos ^^
Pero si hasta me ha dado pena!!!!
creo que el protagonista se está poniendo un poco mayor ¿eh? mira que no distinguir a un espectro de un humano.
Me gusta mucho como lo planteas, justo cuando te esperas dar un respingo en la silla, haces que salga la sonrisa ante la frustación del equívoco.
genial, sigo hacia el segundo.
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