Mientras suena el lacónico sonsonete del lector de noticias en televisión, la pequeña niña intenta entender por qué ya nadie la quiere. Sentada en el suelo en el living acaricia el oso de peluche que tanto tiempo atrás le habían regalado, y no entiende lo que pasa en su vida. Ella se portaba bien, no lloraba, se comía toda la comida que le daban, jugaba con todos los niños en el prekinder, se dormía cuando le apagaban la luz, estaba aprendiendo a ir al baño… pero pese a todo su novel mente se daba cuenta de que ya no era querida en su casa.
Ese día su vida había cambiado por completo. La noche anterior su madre la llevó a su cama apurada, como si quisiera ir al baño después; la acostó y casi sin despedirse de ella salió rauda de la habitación. Al despertar sola por primera vez, sin que su madre la fuera a sacar de la cama, se dio cuenta que algo había ocurrido. Sin entender mucho recordó la ropa que su madre le puso el día anterior, y demorándose el doble más que con la ayuda de ella, logró vestirse.
Temerosamente abrió la puerta de su habitación y salió al pasillo del departamento, donde no se sentía ningún ruido. Se acercó al refrigerador de la cocina, usando todas sus fuerzas logró abrir la puerta, y sacó aquello que todas las mañanas su madre sacaba para empezar el día: la caja de leche. Luego de llenar hasta la mitad su vaso y beberla fría, se devolvió al dormitorio a buscar su oso. Era el día más extraño que podía estar viviendo, su madre ya no estaba, su padre tampoco, y sólo su oso le quedaba como compañía, hasta que se acabara la caja de leche y no supiera qué hacer para sobrevivir.
Mientras suena el lacónico sonsonete del lector de noticias en televisión, la pequeña niña intenta entender por qué ya nadie la quiere. Sola con su oso no logra comprender lo que dice el lector de noticias en televisión, que habla del macabro hallazgo del cadáver de un joven matrimonio en su auto, presuntamente a manos de un psicópata, y la desaparición de su pequeña hija. De pronto siente el sonido de la puerta del departamento al abrirse...