Si entras a este blog es bajo tu absoluta responsabilidad. Nadie asegura que salgas vivo... o entero. Si imaginaste que aquellas pesadillas interminables que sufrí­as de niño cuando te daba fiebre eran horrorosas, prepárate para conocer una nueva dimensión de la palabra HORROR...

miércoles, octubre 03, 2018

Cantante

El cantante estaba tirado sobre un sillón luego de dos horas de ensayo. El músico era el vocalista de una banda de rock que se encontraba preparando un nuevo álbum, por lo que los diez temas que estaban ensayando eran inéditos, lo que implicaba un desgastante proceso interpretativo y creativo grupal que hacía que avanzaran lentamente al tener que ir haciendo anotaciones en la tablatura para utilizarlas a la hora de entrar a la sala de grabación; más adelante vendría el siguiente proceso que era memorizar letra y música para poder interpretarlas en vivo sin necesidad de algún tipo de ayuda de memoria.

El cantante volvió a la sala de ensayos mientras el resto de los músicos seguían descansando y conversando en la sala de descanso aledaña. El cantante vio a través del vidrio el canal del micrófono encendido por lo que se dispuso a cantar una parte del segundo tema que le había dejado incómodo en el ensayo. Al acercarse al micrófono y cantar las dos primeras palabras quedó estupefacto: su voz sonaba extremadamente aguda, más que como falsete como si fuera voz de mujer; el cantante quedó en silencio por algunos segundos, hasta que intentó cantar nuevamente, encontrándose con el mismo resultado.

El cantante estaba desconcertado. Rápidamente se dirigió a la sala contigua a buscar una botella con agua para limpiar su garganta; al entrar a ella sus compañeros lo miraron sorprendidos, pero él entró y salió del lugar sin decir palabra alguna. Luego de beber media botella lentamente mientras hacía gárgaras con el líquido, se dispuso a probar nuevamente su voz al micrófono. Cinco segundos después seguía sin entender por qué su voz seguía sonando como la de una mujer al intentar cantar; de pronto cayó en cuenta que podía tratarse de una broma del sonidista que podía haberle colocado algún filtro al canal vocal y por eso su voz sonaba así. De inmediato se puso de pie y se dirigió al vidrio que separaba la sala de ensayo de la mesa de sonido.

El cantante miraba el vidrio en silencio, tratando de entender lo que estaba viendo. A través del vidrio no se veía ningún filtro activado en la mesa de sonido; sin embargo el cantante estaba más preocupado de otra cosa. Al mirar su reflejo en el vidrio, vio la figura de una mujer de su edad. El cantante de pronto bajó la mirada y vio cómo en su tórax sobresalían dos bultos que no tenía al llegar a la sala de ensayos, y sus caderas se veían bastante más anchas que su cintura. De pronto un dolor en el bajo vientre y una sensación de humedad en la entrepierna del pantalón terminaron por aclarar sus dudas.